Familia acusa negligencia médica tras muerte de mujer operada en clínica estética.
La familia de la paciente acusa al cirujano y a la clínica de haber actuado con negligencia, al no detectar a tiempo una grave complicación tras la cirugía estética. El caso ya fue judicializado.
Una mujer de 66 años falleció días después de someterse a una cirugía estética en una clínica de Lo Barnechea, lo que llevó a su familia a interponer una querella por cuasidelito de homicidio contra el médico tratante.
La intervención quirúrgica, realizada el 17 de agosto de 2023 en la Clínica Monteblanco, consistió en una liposucción abdominal y cervical, junto con una lipoinyección glútea.
Según los antecedentes presentados por la familia, la paciente desarrolló complicaciones severas tras la operación, entre ellas una perforación intestinal que no fue detectada a tiempo.
De acuerdo con la acción judicial, la cirugía se habría extendido por aproximadamente seis horas, utilizando procedimientos como BodyTite y Morpheus, que aplican radiofrecuencia para modelar el cuerpo. Sin embargo, se habría producido una perforación en el íleon distal —parte del intestino delgado— lo que habría desencadenado una falla multiorgánica. Dos días después de la operación, y ya con síntomas de deterioro evidente, la paciente fue trasladada de urgencia a la Clínica Universidad de los Andes. Allí, tras una laparotomía exploratoria, se le confirmó la perforación intestinal, pero su estado ya era crítico.
Falleció el 21 de agosto a las 23:11 horas. La familia acusa una serie de omisiones tanto en la evaluación preoperatoria como en el seguimiento posterior. Señalan que, a pesar de tener antecedentes médicos como hipertensión, hipotiroidismo y bradicardia, la paciente no fue evaluada por especialistas como anestesiólogos o cardiólogos, ni se le practicaron exámenes de imagen adecuados. También cuestionan el hecho de que la clínica no contara con una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), un aspecto que consideran fundamental al tratarse de una paciente con condiciones médicas previas.
Durante los días posteriores a la operación, la mujer presentó somnolencia, dificultades respiratorias, signos de hipotensión y reducción en los glóbulos rojos. Sin embargo, estos síntomas habrían sido minimizados por el equipo médico, atribuyéndolos a efectos de los medicamentos. El hijo de la paciente, quien es médico, notó la gravedad del cuadro clínico y gestionó su traslado a otro centro asistencial.
No obstante, la situación ya era irreversible. El tribunal acogió la querella presentada por la familia, quienes argumentan que el procedimiento se realizó sin los estándares de seguridad médica necesarios y que existe una relación directa entre las decisiones del cirujano y el desenlace fatal.
Hasta el momento, ni el médico involucrado ni su defensa han emitido declaraciones, indicando que el caso está en manos de la justicia.
Fuentes: BioBioChile.
